Cada taller está cuidadosamente curado para ofrecer aprendizajes prácticos, técnicas innovadoras y espacios seguros para el crecimiento personal y profesional.
Kokoro, que significa “corazón” o “espíritu” en japonés, y Kaizen, “mejora continua”, se unen en una práctica de danza que busca la armonía entre cuerpo, mente y espíritu.